lunes, 30 de junio de 2014

(abril).

Y tenía la sonrisa más bonita y más dolorosa que jamás había visto. Y ya no hablemos de esa mirada, que en un segundo podía mostrarte horrores. Pero ella sonreía, ¡y qué valor! Después de todo sonreía, porque alguien le había dicho que si lo hacías no preguntaban, y ella odiaba las preguntas. Así que decidió sonreír.
Y también reía. Reía a carcajadas, porque la risa es la expresión de la felicidad y ella siempre había querido ser feliz. Así que decidió reír, para ver si expresando algo que no tenía podía conseguirlo.

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