domingo, 12 de octubre de 2014

Que me faltas y me falto.

Error tras error.
Caida tras caida.
Besos tras besos.
Y lágrimas tras ellos.

Que ya no te tengo, eso está claro.
Pero que no te quiero, eso ya no tanto.
Intento convencerme cada noche que no te necesito y tras ese pensamiento, rompo a llorar esperando que tú pares ese llanto.
Cada mañana me levanto esperando encontrarme tu olor junto al del café, y me sorprendo al llegar a la cocina y ver la cafetera apagada.

Que no sé, que si sé, que me faltas y me falto. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario